¿Tienes quebraderos de cabeza a la hora de posicionar tu web? ¿No entiendes por qué si das un contenido relevante no se posiciona? Una auditoría SEO puede ayudarte a entender qué es lo que está fallando. Por eso, cada día más empresas y particulares contratan estos servicios. Y aquí te contamos por qué hacerlo.
Qué es una auditoría SEO
Para saber qué es una auditoría SEO, primero tenemos que conocer que significa SEO o Search Engine Optimization. Y esto implica hacer el conjunto de acciones que se realizan sobre una página web para posicionarla en los motores de búsqueda.
Cuando una persona realiza una búsqueda por una palabra clave, el buscador (generalmente Google) posiciona las diferentes páginas según un patrón preestablecido, numerándolas en función de varios parámetros. Cuanto más arriba esté la página en el listado proporcionado, más probabilidad hay que un usuario entre ella.
Una auditoría SEO técnico evaluará el estado actual de una web y propondrá acciones de mejora para que pueda obtener posicionamientos mejores y aumentar de esta forma su visibilidad. Y para ello, es necesario que tenga en cuenta muchos factores.
Cómo se realiza la auditoría, paso a paso
El problema de todo el proceso estriba a que no hay patrones exactos para saber cuando una página posiciona mejor que otra. En teoría, uno de los factores principales es la autoridad de un dominio y de una página, medida en dos índices separados, y a través de dos herramientas, de ahí que haya profesionales que realicen una auditoría SEO SEM (marcada por el índice Semrush) y otros que la hagan a través de Moz.
Ambos índices establecen unas clasificaciones del dominio y de la página, basados en un link juice. Pero, esto no es lo único necesario para posicionar. Para ello, es necesario que la web y las páginas que la contienen, estén escritas de acuerdo a unas normas necesarias para que los buscadores puedan ver si el contenido es relevante para posicionarlo o no. Esta es la razón por la que las empresas se pregunten cuánto cuesta una auditoría SEO y se deciden a realizarla, porque se encargará de evaluar cosas como:
- Verifica que las páginas estén indexadas: para que una página pueda ser mostrada orgánicamente debe estar indexada.
- Comprueba la velocidad de carga: la experiencia de usuario es fundamental, cuanto más tiempo tarde en cargar una página, más probabilidad hay de que el usuario se vaya al siguiente resultado de la búsqueda.
- Optimiza la arquitectura de la web: la arquitectura de la web ayuda a interpretar que el buscador decida presentar una página en los resultados. Clarifica el contenido y jerarquiza la importancia de las diferentes páginas en una web.
- Evalúa si el contenido es relevante para el público entrante: aspecto fundamental, ya que si una página no resuelve la intención de búsqueda, irá bajando en las SERP.
- Analiza la competencia: lamentablemente, para posicionar una web no basta dar un contenido y una estructura apropiada, debe ser mejor que la competencia para obtener mejor posicionamiento.
- Analiza el SEO off page: el posicionamiento no consiste solo en la forma que está hecha la web, hay aspectos exteriores que influyen. El principal es el linkbuilding, o los enlaces entrantes a la web.
Una auditoría SEO tiene en cuenta todas estas variables y es la mejor forma de determinar por qué una web no posiciona como debería hacerlo. Acudiendo a un profesional, estudiará cuáles son los motivos de que tu dominio no se posicione en los buscadores y te ayudará a conseguir las búsquedas orgánicas tan necesarias para amortizar tu web.
Descubre aquí qué es el SEO on page y cómo implementarlo.